ANTECEDENTES
Fue el segundo templo y primera parroquia eclesiástica de Guayaquil, es la Iglesia Matriz, sin duda ya existía a manera de una pequeña ramadita manejada por los curas de Santo Domingo que fueron los primeros en asentarse por estos lares, entre los años de 1541 y 1542, tiempo en que consolida la fundación de la ciudad, el capitán Diego de Urbina. Datos fidedignos la ubican para 1590 sobre el cerro Santa Ana, junto a la Casa del Cabildo, la Plaza de Armas y algo más de 20 casas. Esta Iglesia Matriz, que tuvo como titular a la Pura y Limpia Concepción de María Santísima, era sede importante de la Vicaria de Guayaquil en 1570.
Aquí se veneraría al Apóstol Santiago, Patrón de Guayaquil. A causa de los incendios e invasiones de los piratas, no existe el archivo parroquial completo de la antigua iglesia, convertida en Catedral desde el año 1838. En 1695, la iglesia es trasladada a su nuevo emplazamiento en Ciudad Nueva, lugar en el que se mantiene y cambia su categoría a la de Catedral. Ocupa el mismo lugar hasta nuestros días. Las campanas de la Catedral, en ese entonces iglesia matriz, sonaron a rebato anunciando la Independencia de esta ciudad, el lunes 9 de octubre de 1820. Es trasladada a su actual emplazamiento a inicios del siglo XVIII, se ha mantenido en él por casi 300 años, solo con variaciones en su arquitectura, generadas bien sea por incendios que obligaron a su reconstrucción, o por remodelaciones sucesivas realizadas principalmente a fines del siglo XIX. La iglesia, tal y como se la conoce, fue construida en 1937 y es una de las más visitadas de la ciudad.
Valor Arquitectónico
La catedral corresponde estilísticamente al gótico, aunque construida en 1944 fue realizada en hormigón a diferencia del gótico original de los años 1200 que era construida con piedra en forma de apareos, ello hace que La Catedral de Guayaquil no tenga los arcos arbotantes que eran necesarios para sostener las paredes en su parte superior y que corresponden a las antiguas catedrales góticas europeas. A la entrada de la catedral podemos visualizar una plumilla de este aposento santo de cuando era el tiempo en que Guayaquil se alumbraba de farolitos alimentados con aceites de ballenas. Los pilares de la catedral de Guayaquil , reflejan dos tipos de cruz, una cruz que señala al norte, al este, oeste y al sur (puntos cardinales) y una cruz en x q es la cruz de San Andrés (elemento simbólico el número ocho) por su plano en forma de cruz, la luz del ábside superior ilumina la parte de un corazón imaginario de un crucificado y el altar corresponde a la cabeza de Cristo, para simbolizar que es en la mente que se va a realizar la transformación espiritual. En el interior se observan tres naves por cuyas grandes y espaciosas ventanas ingresa la luz a través de los vitrales. Su estructura está formada por una nave central, una lateral y el crucero que está localizado detrás del altar mayor.
En la parte posterior se encuentran dos torres terminadas en agujas con una nave central de Cimborrio donde se encuentra la estatua del Cristo Rey, bendiciendo a Guayaquil. Siguiendo este modelo es que la nave Este - Oeste es la más larga que la nave Norte – Sur. Las pilastras que sostienen la estructura están diseñadas en forma de una doble cruz, la una señalando a los puntos cardinales y la otra en una diagonal. A partir de los capiteles se desarrollan las ojivas góticas que permiten alcanzar una gran altura dando una imagen de elevación. Los diez escalones del altar corresponden a los diez esplendores de la tradición Judea Cristiana. Los tres primeros representan la luz, la sabiduría y el entendimiento los otros siete representan la victoria, la gloria, la belleza, el triunfo y realización individual, triunfo y realización colectiva y ser solidario. En el altar se encuentran cuatro columnas con arcos ojivales que corresponden a los cuatro verbos: saber, querer, osar y callar o también representan el fuego, la tierra, el aire y el agua que van a estar siempre presentes en las catedrales que han sido construidas por los Frank masones. Estos verbos se encuentran también representados en el portón, este que da hacia la calle Chimborazo, a través de cuatro figuras simbólicas del zodiaco que son el toro o la voluntad, el león o la audacia, el águila o la prudencia y el ángel o el saber. El rosetón conformado por 32 vitrales, son como las 32 vías de la sabiduría de la tradición judeocristiana, es decir los 32 caminos del saber, pues este número significaba santidad.
“La Capilla del Santísimo”, era un rincón, una capilla donde siempre ardía una llama que representaba la gracia divina.
Es un blog muy interesante, dedicado a hacernos conocer un poco mas de la historia de este lugar que se convierte en icono de la ciudad de Guayaquil.Felicitaciones !
ResponderEliminargracias amiga majo, es chevere contar contigo un beso amiga
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